Haití está en tus manos

¿QUÉ ES HAITÍ?
Haití es un país del Caribe situado en la parte más occidental de la isla La Española. Vecino de la República Dominicia, su capital recibe el nombre de Puerto Príncipe. Su superficie total es de 27.750 km cuadrados y su población en 2008 era de 9.776.206 millones de personas, lo que supone una densidad de 255 habitantes por kilómetro cuadrado.

¿POR QUÉ ES CONOCIDO EN LA HISTORIA?
Haití es conocido en la historia por ser el primer territorio del mundo en el que las esclavas y los esclavos abolieron el sistema esclavista de forma autónoma y perdurable en el tiempo.
¿POR QUÉ ES CONOCIDO EN EL MUNDO?
Por nada. Haití es uno de los países más pobres del mundo con un 84% de la población viviendo en condiciones de superviviencia y, como no tiene ni petróleo, ni oro, ni nada de valor material, Occidente lo olvidó y lo dejó abandonado a su suerte. Olvidamos el valor de la humanidad por culpa de nuestra miopía capitalista.
¿QUÉ HA OCURRIDO?
Haití es un país que se ve muy frecuentemente golpeado por accidentes metereológicos que lo devastan aún más si cabe. El pasado 12 de enero de 2010 un terremoto de 7 grados en la escala Richter se manifestó a 15 escasos kilómetros de la capital del país y a una profundidad de sólo 10 kilómetros. Una magnitud tan grande que se dejó sentir en Venezuela, Jamaica y, claro está, en la República Dominicana.
La cifra de muertos podría ascender hasta las 200000 personas pero, ahora lo que más nos preocupan son quienes siguen vivos pero sin esperanzas.

¿QUÉ CONSECUENCIAS TENDRÁ?
Supone la ruina total de un país y de muerte en vida de sus habitantes. Estos días, y está muy bien, todo el mundo ha girado su mirada hacía Haití, pero en unos meses ya nadie se acordará como suele pasar. En cuanto los medios de comunicación dejen de enfocar sus objetivos hacía las tierras caribeñas todo se olvidará y nos parecerá desde nuestra comodidad que todo está ya arreglado.
Lo más grave para la estabilidad política del país es que todas las infraestructutas se han visto arrasadas. Ministerios, hospitales, colegios...todos los mínimos necesarios no están y hacen que Haití se desplomé aún más en la miseria.
SOLIDARIDAD COMO COMPROMISO SOCIAL Y NO COMO RESPUESTA A UN ESTÍMULO.
Tal y como muchas personas en la red y en los medios de comunicación hemos demandado, ojalá nos creamos realmente que, a pesar de la crisis que estamos sufriendo, somos genes privilegiadas que hemos tenido la suerte de nacer en tierras privilegiadas. Está bien que ayudemos ahora en estos momentos de emergencia, pero estaría mejor creernos la ayuda al desarrollo.
Si hubiéramos actuado antes seguramente muchas madres podrían hoy abrazar a sus hijas y muchas niños podrían ayudar a sus abuerlas a caminar entre los escombros de un terremoto extremedamente potente.
Yo digo sí a la ayuda al desarrollo, a ese mínimo del 0´7% de nuestro PIB para esos países que sin nuestra ayuda jamás podrán salir del pozo de la miseria y de la frustación.
AHORA DEPENDE DE TI.
Muchas gracias.