En Onda las fábricas antiguas son un peligro porque la inacción de los distintos equipos de gobiernos las han llevado a una situación de degradación y abandono inadmisible. Nuestro esplendoroso pasado industrial amenaza nuestra seguridad.
La solución pasa por restaurar las más destacadas y míticas de estas fábricas para ponerlas al servicio de nuestro incipiente sector turístico. Hornos morunos y chimenas antiguas están protegidas por la ley de patrimonio y podrían ser de gran atractivo turístico. Generando de esta forma puestos de trabajo directos (restaurándolas) e indirectos (turíscitos, restauración, comercio...). El resto de fábricas deben de estar tapiadas a la perfección para evitar peligros a la ciudadanía y, las que presenten daños estructurales, derruidas para evitar que días de viento como los pasados puedan hacerlas caer. Eso sin contar con el paisaje desolador y degradado que esas fábricas antiguas muestran a residentes y turistas.
La última vez que propuse actuaciones que pudieran evitar daños humanos como el ocurrido esta semana en Onda, fue el 17 de enero de 2013 con número de entrada 961 en el registro del Ayuntamiento con el caso omiso de los partidos del pleno y sólo con el apoyo de los medios de comunicación locales y provinciales.
La política responsable debe proteger a la ciudadanía.
David.
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